De Thin Lizzy y las bandas subvaloradas


Gracias a un amigo que suele indagar en las bandas ignoradas por la industria me hice de un excelente registro audiovisual editado por los irlandeses Thin Lizzy. Se llama “Live and Dangerous” y data de 1978, cuando Phil Lynott, otro frontman carismático muerto a temprana edad, fastidiado por la constante rotación del “Frampton Comes Alive”, exhortó a sus compañeros a intentar su propia experiencia en vivo, porque poseían las canciones y los seguidores suficientes para lanzarse a esa empresa.

Además del concierto en el Rainbow, el DVD incluye una sección de extras súper interesante. Varias presentaciones en el programa televisivo “Top of the pops”, un show en vivo para la BBC y una entrevista a los miembros de la alineación que participó del recital, en un momento en que hacer álbumes en vivo no era algo habitual ni tampoco una estrategia para extender la existencia comercial de una banda ad portas de la extremaunción.

La placa resume la potencia de una agrupación imprescindible en todo lo que vino después. Es hard rock y heavy metal cuando esos términos ni siquiera existían. Examinado sin demasiada detención, el material deja al desnudo las referencias recogidas por otros intérpretes que alcanzaron mayor notoriedad en los años venideros. El juego de guitarras, los riffs, las letras de Lynott, conjugaron un todo que lamentablemente ha sido subvalorado entre los seguidores del estilo.

Asimismo, otros que no exhiben los mismos méritos han ganado un sitio de privilegio en desmedro de grupos que con su aporte colocaron los cimientos de lo que hoy se escucha. La música es cíclica. Lo que ahora suena muy fresco a oídos neófitos no es más que un refrito de un plato servido con anterioridad. Quedarse en la superficie, con lo que se supone uno debe escuchar para ser un entendido, es insuficiente para comprender el devenir del rock.

La conclusión es que nos falta mucho por conocer. No es un descubrimiento que me valga un reconocimiento Nobel, pero si una invitación a escarbar más profundo a quienes se introducen en la música. Hace un par de décadas poseer una cinta de audio era un privilegio. Incluso una copia con una carátula fotocopiada. Hoy los recursos están al alcance de un click. No hay excusas para quedarse únicamente con Black Sabbath, Iron Maiden y Metallica. La historia del rock es un universo por descubrir.

Silje Wergeland, la nueva voz de The Gathering: “Nadie debiera creer que estoy reemplazando a alguien”


Menuda tarea ha cargado sobre sus hombros la noruega Silje Wergeland. Luego de meses de incertidumbre y especulaciones, The Gathering reveló que la hasta entonces vocalista de Octavia Sperati ocuparía la vacante dejada por la venerada Anneke van Giersbergen, tras una partida que legó varios álbumes de culto y una voz que la elevó a la categoría de musa. Pero la escandinava no se asusta por los inevitables paralelos que establecerá la audiencia.

En una entrevista exclusiva con Ciudad Metal, y en medio de la agitación por el próximo lanzamiento de “The West Pole”, el álbum que marca su debut como cantante de la banda holandesa y el retorno de los músicos a sus raíces rockeras, aunque sin perder la notable capacidad de crear atmósferas que los ha convertido en un referente obligado para los cultores del género, Silje cuenta por qué se acercó a The Gathering y envía un caluroso saludo a sus fans chilenos, a quienes espera conocer muy pronto.

– ¿Esperabas una reacción tan cálida de parte de los fans de The Gathering cuando revelaron los primeros cortes de “The West Pole” a través de Myspace?
– Estás en lo correcto, recibimos muchos y muy dulces comentarios de bienvenida. Fue totalmente abrumador. Por supuesto de antemano esperaba que a la gente le gustaran las nuevas canciones y estábamos bastante seguros de que habíamos hecho un buen álbum, pero tú nunca sabes y esto fue en verdad un poco más de lo que esperábamos.

– ¿Por qué buscaste la posición de cantante en la banda y qué sucederá con Octavia?
– Estaba en un punto en que ya había comenzado a buscar otras cosas que hacer y Octavia no estaba muy ocupada en el tiempo en que contacté a The Gathering. En Octavia estábamos sintiendo que la banda no ocupaba la primera prioridad en ese entonces. Entonces acordamos que era buen tiempo para congelar la banda durante el último verano. Por ahora no hay planes futuros con Octavia. Me encantaba tocar allí y The Gathering me está brindando otra aproximación a la música lo que es un reto agradable. Me encantó componer y cantar las canciones de “The West Pole”, supongo que todo es pasión por la música. La música de The Gathering me llegó directo al corazón e inmediatamente quise crear las letras y las voces. También creo que ellos han hecho algunas canciones realmente maravillosas en sus álbumes anteriores y era importante para mí poder relacionarlo con esas canciones. Y por supuesto es un honor tocar junto a estos muchachos.

– ¿Has sentido algún tipo de miedo o aprehensión por la comparaciones lógicas que surgirán entre tú y Anneke van Giersbergen?
– Hehe, bueno, es bastante obvio que cualquiera que llegue a una banda que ha tenido un integrante exitoso se sentirá un poco presionado. Pero solo puedo hacer mi trabajo lo mejor que pueda y no pensar en mi antecesora todo el tiempo. No creo que nadie debiera creer que estoy reemplazando a alguien porque nadie puede ser reemplazado. Ésta es una nueva fase para The Gathering. Su última cantante decidió dejar la banda y tocar junto a otras personas y The Gathering quiso continuar tocando, iniciar una nueva era, hacer algo diferente y pienso que la mayoría de la gente lo entenderá de esa forma.

– ¿Cómo describirías el nuevo disco?
– El álbum tiene muchas atmósferas y al mismo tiempo posee esa actitud rock con elementos heavy y pop. Diría que contiene elementos de cada uno de los álbumes de The Gathering, pero al mismo tiempo sientes algo fresco en él. Puedes oír que es The Gathering, pero también escuchar nuevos elementos en los que The Gathering también es bueno. No creo que la meta de la banda fuese experimentar mucho, su principal propósito fue hacer un álbum orientado hacia el rock.


– ¿Escribiste todas las letras, cuál fue tu nivel de participación en el proceso de composición?
– Escribí todas las letras que interpreto. René hizo la mayoría de las canciones del álbum, pero Frank también creó algunas. La mayor parte de las canciones tenía “cuadros” más o menos hechos cuando me integré. No había líneas vocales ni letras, así que hice lo que interpreto en el álbum. Por supuesto que hubo cooperación en las canciones y unos pocos cambios aquí y allá para que el resultado fuese el mejor. También tengo una canción sola al piano que hice y toco yo misma en el disco.

“ESPERO IR A TOCAR PRONTO A CHILE”
– ¿Cómo piensas que sonarán las buenas viejas canciones en tu voz?
– En este momento estamos ensayando algunas canciones antiguas y pensamos que están funcionando bastante bien, pero tendremos que esperar y ver cómo será en vivo.

– The Gathering posee un lugar muy especial dentro de los chilenos. ¿Está entre sus planes visitarnos pronto para mostrar el álbum al público sudamericano?
– Sí, los chicos me han contado cuán maravilloso ha sido para ellos tocar en Chile. Creo que ustedes también tienen un lugar muy especial en el corazón de The Gathering. Espero, y sé que el resto de la banda también, tocar muy pronto allá. ¡Sería fantástico!


– ¿Podrías enviar un saludo a tus fans chilenos?
– Sí, como mencioné en la última pregunta, realmente espero que podamos ir y tocar muy pronto en Chile. De nuevo, muchas gracias por la amable bienvenida que me han dado.

Exclusiva con la vocalista Angela Gossow: “Disfruto todo lo que hago en Arch Enemy”


La sorprendemos bebiendo una gran taza de té verde en uno de los escasos momentos en que toma un relevo en su agitada vida de cantante de rock para regresar a la rutina cotidiana de un habitante promedio de Suecia, el país que adoptó como residencia tras sumarse a las filas de Arch Enemy a principios de la década. En una conversación relajada, Angela Gossow, una de las vocalistas más prominentes del death, conversa sobre su esperado regreso a Chile, su pasión por el trabajo y el rumbo del metal actual.

– Estoy un poco preocupada, porque hasta ahora no hemos visto ningún afiche oficial de la próxima presentación de Arch Enemy en Chile. ¿Cuál es el estatus de esa fecha?
– Hasta donde sé está confirmado. No sé cuánto están haciendo los promotores ahora, puedo preguntar, pero está definitivamente confirmado y vamos a tocar.

– ¿No habrá cancelaciones de último momento?
– Bueno, no por nuestro lado. Creo que el promotor es confiable, ha estado haciendo otros grandes conciertos grandes y estoy segura que éste no será cancelado.

– ¿Qué recuerdas de tu primer concierto en Chile hace dos años?
– Fue agradablemente sorprendente. Era mi primera vez en Chile y fue un gran público. Gente muy amable, alojamos en un hotel muy agradable, no conocimos mucho del país porque viajamos al día siguiente, pero recuerdo que fue un gran show y estamos esperando regresar.

– ¿Cuán diferente es el público sudamericano del europeo?
– Creo que son más emocionales, quizá un poco más locos. Gritan más, cantan entre las canciones, definitivamente son más apasionados.

– Como fans, ¿qué podemos esperar del concierto del 6 de mayo?
– No hemos tocado en Chile desde comienzos 2007 y no hemos interpretado nada del nuevo álbum aún. Vamos a tocar muchas nuevas canciones de “Rise of the tyrant”.

– Parece que no existe la palabra descanso para Arch Enemy. O están de gira o bien grabando un nuevo álbum.
– Si no andamos de gira o en el estudio, estamos aburridos en casa. No creo que eso sea bueno para una banda. Para un músico es bueno tocar en vivo o grabar música. Todo el tiempo entremedio es realmente aburrido. Preferimos estar ocupados, si no estamos ocupados no hacemos dinero y eso no es bueno tampoco. Estoy acostumbrada. Me gusta estar de gira y me gusta estar en el estudio. Me aburro en casa.

REGRABANDO LOS TEMAS ANTIGUOS
– ¿Ya están grabando el próximo disco?
– Sí, desde el año pasado. Básicamente siempre estamos escribiendo. Pensamos grabar un nuevo álbum probablemente en 2010. Estamos regrabando las canciones de “Black Earth”, “Stigmata” and “Burning Bridges” -los álbumes que registró Johan Liiva cuando fue cantante de Arch Enemy- y eso saldrá en agosto o septiembre de este año. Luego comenzaremos a escribir un nuevo disco.

– Eso sería una gran sorpresa para tus fans.
– Sí, ¡espero que les guste! Será interesante.

– ¿Te sientes cómoda interpretando esos temas?
– Sí, las trato como si fuesen covers. Me gustan las canciones. Es cool.

– Pero también habrá temas nuevos.
– No, solo canciones antiguas regrabadas. Mucha gente pregunta si podría rehacer esas canciones, muchos chicos no conocen los antiguos álbumes. Espero que con esto descubran los discos viejos y los escuchen.

– ¿Hay título para esa placa?
– Sí, pero es secreto aún. Hasta ahora oficialmente se llama el álbum de regrabaciones.

“SOY UNA TRABAJÓLICA”


– ¿Estás disfrutando de algunos días libres?
– No, estoy trabajando de hecho. Estoy muy comprometida con el managment de Arch Enemy. Estoy preparando la gira sudamericana y el tour europeo después de ella. Tengo mucho que hacer.

– ¿Cómo es la vida cuando no estás de gira, qué cosas te gusta hacer?
– Trabajo. Arch Enemy es un pequeño negocio. Leo un par de páginas de un libro antes de dormir. No soy alguien que salga mucho. Voy al gimnasio todos los días y cocino en la tarde. Prefiero estar ocupada, haciendo algo bueno por mi futuro y por Arch Enemy.

– ¿Dispones de tiempo libre solo para ti misma?
– Sí, pero es aburrido (ríe). No creo que lo necesite. Solo quiero trabajar. Creo que soy una trabajólica.

– Suena como un trabajo soñado.
– Sí, cuando lees entrevistas de bandas no lo ven como un trabajo. Es lo mismo para Arch Enemy. Disfruto cada cosa que hago. No se siente mal, no es un trabajo de mierda al que voy todos los días. No estoy trabajando en McDonalds o en la caja de un supermercado. Amo lo que hago con Arch Enemy, es mi hobby, mi pasión, lo que más me gusta hacer.

– ¿Es un empleo que paga bien?
– Podemos vivir de esto, pero no somos ricos, lo siento, no somos Guns n’ Roses (ríe).

– Pero gozan de ciertas ventajas, como viajar alrededor del mundo.
– Sí, exactamente. No necesito un auto, porque siempre viajo en trenes y aviones y no tengo que ahorrar mucho dinero para vacaciones porque viajo de todos modos. La vida es bastante barata para un músico.

– ¿Visitas lugares turísticos cuando estás en otros países?
– Depende. A veces lo hago, a veces no. Prefiero conocer a la gente en lugar de observar las grandes catedrales o lo que sea. Creo que descubrir un lugar es conocer a la gente, trabajar con ellos, así comprendes el verdadero espíritu del país.

– ¿Visitaste algún lugar cuando estuviste en Chile?
– No soy una buena turista. Nunca ando con una cámara para tomar fotografías. No me gusta ese estilo de turismo. Caminé por las calles con los chicos de la banda, salí a restoranes donde tenían comida muy picante, comida sudamericana, hablé con fans. Me llevé una buena impresión del país. Vi los ghettos cuando conducíamos hacia el aeropuerto. Creo que entendí el espíritu del país. Son muy apasionados, amistosos, pero también está la pobreza, el crimen, no podía salir por mi cuenta, como mujer tengo que ser un poco cuidadosa. Probablemente conocí más de la gente que alguien que se checa en el hotel y está en un área segura. Prefiero descubrir el país desde una perspectiva real.

– ¿Viste los niños en las calles, los sin casa, la pobreza?
– Así es Sudamérica. Tienen muchos recursos, pero algo parece no funcionar. No hay una clase media lo suficientemente fuerte. La gente pobre es realmente pobre y la rica, muy, muy rica. No existe una clase media, no tan fuerte. Pero creo que está cambiando. No sé si está mejorando por la crisis financiera del momento, pero parece que los países sudamericanos están volviéndose más fuertes.

– ¿Obtuviste inspiración de esa realidad para escribir nuevas letras?
– Escribo letras sobre injusticia social y eso es parte de ello. Cuando escribo no solo critico, sino que digo pelea, intenta educarte a ti mismo para tener sueños y metas. La libertad es algo del interior. Nadie puede comprar la libertad. Mucha gente rica no es libre en lo absoluto. Es algo dentro de tu cabeza. Es comprender tu potencial y alcanzar tus sueños.

DEATHCORE: TÉCNICA SIN ALMA


– Hablemos de música, ¿qué estás escuchando?, ¿alguna recomendación de Angela de Arch Enemy?
– Creo que todos debieran escuchar las bandas que fundaron el metal. Regresen a setentas, ochentas y noventas. Soy hija del metal de principios de los ochentas. Todavía escucho Dismember, Entombed, Carcass, Morbid Angel, Obituary, Testament, Slayer. No me gustan las bandas nuevas de deathcore o metalcore. Me gusta el death metal con mucha alma. Me gusta Death, Chuck Shuldiner. Sigo con las viejas bandas.

– ¿No te agrada esta nueva ola de death y metalcore?
– No realmente. Están tomando elementos de las viejas bandas, pero creo que no comprenden el alma de esta música. Suenan demasiado construidas y técnicas, muy Protools. Extraño la pasión, el alma.

– No suena tan real como antes.
– No suena real en absoluto. Con el equipamiento de estudio disponible y el software ni siquiera necesitas ser capaz de tocar un instrumento. Es muy técnico. Me gusta lo que habla a mi corazón.

– Muchas gracias Angela. Fue muy agradable conversar contigo. ¿Algún mensaje final para quienes escuchan Ciudad Metal?
– Gracias por tomarse el tiempo de escucharme. Espero verlos a todos en el show en Chile. Estará genial. Estaremos tocando canciones de “Rise of the tyrant” que no hemos tocado nunca antes allá. Estamos esperando regresar, patear algunos traseros y celebrar el “pure fucking metal”.

[audio:http://www.fileden.com/files/2008/12/31/2247147/Angela.mp3]

***Último minuto: entradas a la venta por sistema Ticketmaster, entre 12 y 14 mil pesos.

Chile se inscribió como la fecha más multitudinaria de Iron Maiden


Iron Maiden continúa escribiendo la historia del heavy metal. La noche del 22 de marzo de 2009 sumó un nuevo capítulo a un libro que contiene todos los ingredientes de un best seller. Chile, un pequeño país que cuelga del continente americano, tuvo el honor de alzar el récord del concierto en solitario más numeroso ofrecido por la banda en toda su carrera. Porque esta gente quiere a la Doncella de Hierro, aunque la relación consigne episodios negros como la colocación del apellido satánico a un rock que el paso de los años no amenaza con consumir.

La del domingo fue mi experiencia más próxima a la banda. Todos mis reportes anteriores han sido escritos desde la perspectiva de quien se instala en la cancha, pero esta vez accedí a la barricada para tomar fotografías en una misión que hasta minutos antes del concierto parecía imposible. El calor de los fuegos artificiales que abren el espectáculo de la aclamada gira “Somewhere back in time” incrementó la temperatura, si es que podía, de quienes aguardaban apretujados contra las vallas, el comienzo del show. “Aces High”, un clásico que por si solo el año anterior hizo que valiera la pena la compra del boleto, repitió un comienzo demoledor.

Observado desde una cierta altura, el recinto hípico donde tuvo lugar el evento épico asemejaba un campo de batalla. Un escuadrón de soldados vestidos con camisetas negras estampadas con los distintos álbumes de la banda, desde “Iron Maiden” hasta “A matter of life and death”. Otra vez asistimos a un concierto transgeneracional. Si hasta en un acto de poca prudencia, los padres de una niña que apenas tendría dos años salían con la infante en andas, correctamente ataviada con una polera negra y entonando un “olé, olé, olé…” que fue seguido a coro por los enternecidos fans.


Respecto a la escala anterior del “Somewhere back in time” hubo algunas diferencias. La evidente, la concurrencia que traspasó las 50 mil personas situando al evento a la par de un baladista en la cúspide de su fama. Aunque, claro está, los metaleros solo hacen noticia cuando provocan desmanes o desobedecen las normas de seguridad. Por ello Bruce Dickinson invitó a los fanáticos a moverse dos pasos hacia atrás para poder respirar y evitar el estigma que cae sobre las cabezas de quienes escuchamos rock pesado. Por fortuna, el recital registró un ínfimo número de detenciones. Ni comparado con un partido de alto riesgo.

Luego, la puesta en escena. Efectos pirotécnicos complementaron la interpretación, una figura de Eddie momificado sorprendió tanto por su titánica estatura como por el fuego que despedía por sus ojos y para “The number of the beast”, un demonio emergió de la escenografía ambientada en el antiguo Egipto. Y tercero, la inclusión de tracks que hace mucho tiempo no cantan en vivo, como “Children of the damned”. Un obsequio que nos llevamos en el corazón. También atesoramos las palabras del energético frontman, quien aseveró que volverán a pisar suelo chileno cuando tengan entre manos el álbum que lanzarán el año venidero.

En lo emocional, me quedó con el concierto de 2008. No hubo llamas ni una multitud tan impactante como del Club Hípico, pero la huella que dejó en mi memoria es más honda. Quizá repetir un mismo espectáculo noche tras noche en cientos de ciudades desgasta la capacidad de producir discursos que impacten en la fibra sensible de los fans. La rutina de aterrizar en un coliseo para tocar un set de temas idéntico al de la jornada anterior convierte a la música en un trabajo más, aunque para los románticos posea una dimensión distinta a la de cualquier otra profesión.

Pero la Doncella de Hierro es incorruptible. La banda británica ahora debutará en la pantalla grande. El 21 de abril es el estreno de la película que documentó “Somewhere back in time”, una nueva pieza del antropólogo canadiense Sam Dunn, el mismo detrás de “Metal, a headbanger’s journey” y “Global Metal”. “Flight 666” revela el impacto planetario del emblema viviente y muestra las bambalinas del tour mundial que los tuvo dos veces en Chile interpretando lo más selecto de su abultada discografía. Habrá que abordar ese vuelo.

Anneke, la voz que robó el habla a los metaleros

Anneke van Giersbergen repitió el milagro. La holandesa que enseñó a escuchar a los fanáticos del metal durante sus años junto a The Gathering, a quienes debe una incondicional masa de devotos seguidores, asombró nuevamente a un público atípico para el tipo de música que hoy interpreta, un rock minimalista por momentos sustentado únicamente en su privilegiada voz. Y cómo no, si apenas comienza a cantar la audiencia se sobrecoge ante una melodía que parece brotar directo del alma.

Agua de Annique, la banda que formó tras su partida de The Gathering, legitimó a Anneke como una de las intérpretes más importantes de la escena actual. Una cantante que trasciende géneros y etiquetas, que llena cualquier registro y congrega a un heterogéneo grupo de seguidores, desde quienes la conocieron agitando su larga cabellera a mediados de los noventa y los que la amaron por los trabajos más pausados que antecedieron su adiós a la emblemática agrupación europea. Su talento es tan indiscutible como su simpatía y carisma sobre el escenario.

La sencilla Anneke se encarga de derribar cualquier barrera posible. En un ambiente muy íntimo, tenuemente iluminado, compartió con los chilenos sus últimas composiciones. “Beautiful One”, “Day after yesterday”, “Sunken soldiers ball”, “You are nice!” se sucedieron para disfrute de los fans. Pero hubo más. “Scorpion Flower”, de su colaboración junto a Moonspell, “The blowers daughter” y “Somewhere”, contenidos en el aún más reposado “Pure Air”.

Sus músicos demostraron sobriedad y eficacia. En tanto Anneke, multifacética, tomó la guitarra en varios temas y optó por el teclado en otros. Un goce para los oídos.

Pero me ocurrió algo extraño. Al escucharla gritar en su lograda versión para “Digging the grave”, original de Faith No More, recordé por qué me gusta el rock. Lo que me apasiona del estilo es que por naturaleza no permanece quieto. Si bien puede jugar con los tiempos y posee tantas derivaciones como ejecutantes, en esencia es música furiosa apta para desintoxicar el espíritu. En esto no hay fórmulas predeterminadas. Si no salí del teatro emocionada como la mayoría nada más significa que poseo una sensibilidad distinta.

Mención aparte para un detalle de la organización. Los reporteros gráficos no pudieron acceder a la zona inmediatamente anterior al escenario, donde suelen ubicarse durante los tres primeros temas y así obtener imágenes más cercanas de los artistas. Como no hubo un aviso de por medio, varios no portaban lentes apropiados para la distancia en que la prensa fue acomodada, añadiendo enorme dificultad a su trabajo. Una cuota de cortesía a este respecto será bienvenida en próximas oportunidades.